viernes, 22 de octubre de 2010

21 de octubre 010, jueves.

Otra vez me dormí. Quiero llegar al fac a eso de las 8 am, y nunca lo logré. En general llego a eso de las diez. El miércoles de mañana cambié mi despertador para las 7 am y de tarde lo dejé olvidado adentro del futbolito que está en el segundo piso del fac, frente al taller donde pinto. Me  boicoteo. Supongo. Porque no hay nada más horrible para mí que levantarme temprano. Pero si no lo hago no me alcanza el día. Tengo que levantarme temprano. Tengo que levantarme temprano. Tengo que levantarme temprano. Tengo que levantarme temprano. Tengo que levantarme temprano. Tengo que levantarme temprano.


No hay comentarios:

Publicar un comentario